5 horas. 5 horas son las máximas que logro dormir para que mantenerme en vida no suponga un obstáculo para estudiar.
Sueño. Aburrimiento. Agobio. Desesperación. Estudio.
Los terribles exámenes de enero ya están aquí; es más, de seis que tenemos que realizar, tres ya han tenido lugar, por lo que podemos decir que estamos en el ecuador del asunto. Por mi parte, he de reconocer que no me han ido mal; quizás no tan bien como me hubiera gustado, pero tampoco vamos a quejarnos... que a veces nos olvidamos de que estudiar puede ser mucho más complicado de lo que parece.
Y hoy, fin de semana. Pero aunque es sábado, la rutina sigue siendo la misma: no existen los días de fiesta en plena evaluación. Sólo queda consolarnos con que ya queda menos para terminar. Y sí, el jueves 20 sí que existirá la fiesta, y vamos si existirá... de alguna manera tienen que olvidarse todos los malos ratos pasados durante el último mes.
En fin, entrada corta hoy, pero es lo máximo que me permite este descanso de estudio de Psicología médica, asignatura que se me está atragantando un poco. Espero escribir con más motivación y ánimo la próxima vez...
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